





Trabajadores metalúrgicos salieron nuevamente a la calle y llamaron la atención. Acompañaron a los jubilados en la marcha del 9 de abril como lo han venido haciendo en las anteriores. El sindicato que los representa (UOM) movilizó y al día siguiente, el paro fue rotundo en el sector.
La conducción del gremio lo venía pronosticando. Ajustes, deterioro de la industria, despidos, fueron palabras que resonaron en las expresiones de Diego Espeche, sec. de Organización en la conducción nacional y sec. Gral. de UOM San Miguel. Sumando el deterioro en los salarios y estado de «desprecio y abandono» a los jubilados.
Un escenario que se había vivido y la metalúrgica siempre fue una de las más golpeadas. No obstante, el gremio nunca aflojó ante las grandes peleas paritarias logrando un último incremento que el gobierno no le firmaba homologación y al fin lo hizo.